Grifos electrónicos que debes conocer
Los grifos electrónicos son aquellos capaces de detectar nuestras manos cuando las situamos bajo el caño. En ese momento se activan y permiten que el chorro de el agua salga. Un sistema que nos permite ahorrar en el consumo, y que puede utilizarse tanto en un hogar como en espacios colectivos. Te contamos qué tipos hay.
El funcionamiento de los grifos electrónicos
Este sistema de apertura automática se debe a un sensor de infrarrojos que los grifos electrónicos llevan incorporado. Al detectar a una distancia determinada que se corta el haz de luz, por ejemplo, al colocar las manos delante, se produce la apertura del grifo y sale el agua. También es posible que se active al identificar variaciones en las ondas de la señal emitida.
La alimentación para que puedan funcionar suele ser a base de baterías alcalinas que lleva el circuito de fábrica o corriente. Aunque lo normal es utilizar cuatro, algunos modelos emplean una única batería.
La principal ventaja que ofrecen los grifos electrónicos es el ahorro en el consumo, ya que se evita que queden abiertos por olvido o que se derroche agua mientras se realiza otra actividad como enjabonarse. Además, resultan más higiénicos al no tener que entrar en contacto con ellos para que funcionen.
Otra ventaja es que suelen incluir un cierre de seguridad que impide el paso involuntario del agua caliente, cuando existe la posibilidad de modificar la temperatura. Se encuentran disponibles en el mercado tanto para lavabo como fregadero, bidé y ducha. No obstante, los grifos electrónicos de lavabo son los más comunes.
Tradicionalmente, los grifos electrónicos se han venido utilizando en baños concurridos. Esto es, aquellos que son utilizados por un número elevado de personas y de forma continua. Por ejemplo, hospitales, hoteles, restaurantes y un largo etcétera. Sin embargo, en la actualidad su instalación comienza a ser popular en los hogares, pues resulta bastante sencilla.
Tipos de grifería electrónica
Tal y como sucede con la grifería tradicional, los grifos electrónicos se presentan en diferentes variedades. A rasgos generales, podemos distinguir entre tres tipos principales: los estándar, que son los que más se utilizan, los que llevan incorporado un regulador de temperatura y los de caño alto.
Grifos electrónicos estándar
La grifería electrónica estándar es aquella que se asemeja a la tradicional pero con la diferencia de que lleva el sensor incorporado. Dentro de este tipo es donde encontramos la mayor variedad, no solo en los diseños sino en los extras que puedan traer.
En Grifería Clever están disponibles dos modelos dentro de la gama Electrónica.
En primer lugar, grifería electrónica elegance presenta un diseño innovador que destaca por la combinación de estilos. Con zonas redondeadas que recuerdan a las de la grifería tradicional, pero que rompe con ellas al presentar un caño plano en la parte superior. Da así, una imagen mucho más moderna y elegante que se adapta a cualquier sala de baño.
Las griferías electrónicas incluyen un aireador antivandálico que requiere una herramienta especial para su desmontaje. El aireador también es orientable y permite dirigir el chorro del agua hasta la posición deseada consiguiendo un mayor confort. Además, se obtiene una reducción del caudal de agua a 7 litros por minuto, lo que implica un ahorro considerable.
En lo que respecta al sensor de estos grifos electrónicos, se activa a una distancia de 15 cm y permanece saliendo agua durante 55 segundos, momento en el que se interrumpe la salida de agua. Con protección antivandálica, evita la repetición de ciclos y cualquier intento de ser desmontado.
Higiénico y práctico, es perfecto tanto para su uso en hogares como en zonas comunes. Fabricado en latón latón europeo EN 12.164, presenta un acabado cromado de alta calidad que garantiza la resistencia al uso y acentúa su belleza. Como otros productos de Grifería Clever, ofrece una garantía de 2 años.
La grifería electrónica platinum es una apuesta moderna y singular. Su diseño resulta muy llamativo por sus líneas angulares y la forma rectangular e inclinada de su caño. Gracias a esta inclinación, se garantiza el máximo confort en la salida del agua en forma de cascada. El aireador enrasado permite una reducción del caudal de agua a 7 litros por minuto, lo que implica un ahorro considerable.
Su sensor electrónico y antivandálico se activa también a una distancia de 15 cm con la detección de las manos y el chorro se mantiene hasta los 55 segundos. El aireador también viene equipado con un sistema antivandálico que impide los intentos de ser desmontado.
Este tipo de diseño se adapta a las necesidades más exigentes y garantiza en todo momento la máxima higiene y el confort. Por sus dimensiones compactas de 125*142 mm ya instalado, se adapta sin problemas a cualquier tamaño de lavabo, tanto en los particulares como aquellos de zonas colectivas.
El modelo Platinum ofrece también una garantía de 2 años. Fabricado en latón europeo EN 12.164, consigue un acabado cromado de alta calidad que potencia la sensación de limpieza e higiene y que garantiza la resistencia al uso. Su original diseño se integra muy bien en baños modernos y exclusivos.
Grifos electrónicos con regulador de temperatura
Esta gama de grifos electrónicos cuenta con las mismas características que los estándar. La diferencia reside en que, mientras los anteriores solo ofrecen la posibilidad de regular la temperatura desde la válvula a la que van conectados, este tipo cuentan también con una pequeña maneta que permite aumentar o bajar la graduación del agua. Aunque puede resultar una ventaja en algunos casos, reducen también la higiene al entrar en contacto con la grifería.
Grifos electrónicos de caño alto
En tercer lugar, podemos encontrar grifería electrónica con las mismas características que los dos anteriores, pero con un caño de mayores dimensiones. Son adecuados para aquellos lavabos o fregaderos de cocina cuando se necesita una distancia mayor para la salida del agua.
