5 trucos para ahorrar agua en la vida diaria

ducha higienica
Ahorrar agua se ha convertido en una prioridad en nuestra sociedad. Al tratarse de un recurso escaso y encontrarnos en una situación crítica medioambiental, es imprescindible que, tanto desde las organizaciones como desde cada hogar, se tomen medidas para reducir el gasto innecesario. Si tienes dudas acerca de cómo lograrlo en tu hogar, ¡aquí te dejamos algunos sencillos consejos!

Cómo ahorrar agua de una forma sencilla

Antes de entrar en cómo podemos ahorrar agua desde nuestras viviendas, es conveniente saber por qué debemos hacerlo. Aunque cada año sigamos viendo que llueve, las sequías son cada vez más frecuentes y prolongadas, y sumado al aumento de la temperatura global de la Tierra, cada gota de agua que podamos ahorrar y conservar para el futuro, cuenta.
Por otra parte, para poder hacer uso del agua tal y como lo hacemos, es necesario tratarla previamente. Esto implica un gasto de energía y combustible considerable, que también contribuye con el consumo imparable de recursos del planeta y la contaminación del mismo.
Y desde un prisma más pequeño, ahorrar agua tiene una repercusión directa en el importe de nuestras facturas. Por lo tanto, reducir este implica también que el desembolso que realizamos mes a mes sea menor. Con esto dicho, vamos a conocer con qué sencillos trucos podemos reducir el gasto de agua en nuestros hogares.

Cierra los grifos

La forma más evidente de ahorrar agua es reducir el gasto o el uso que hacemos de esta. No se trata de tener que sacrificar el confort o de contar cada una de las gotas que utilizamos, sino de aprender a hacer un uso responsable.
¿Y qué se entiende por un uso responsable? Pues cerrar los grifos en aquellos momentos en los que no necesitamos el agua. Estos son, por ejemplo, mientras nos enjabonamos en la ducha, mientras nos cepillamos los dientes o al frotarnos las manos con jabón.
Durante este tiempo, el agua corre sin medida y es completamente innecesario que el grifo esté abierto. Aunque te parezca una cantidad irrisoria, la realidad es que son muchísimos litros, que al final del día y del mes, suponen cientos e incluso miles. ¡Podemos asegurarte que notarás la diferencia en las facturas!

Instala grifos que propicien el ahorro

Si no quieres gastar agua, es tan sencillo como cerrar el grifo, tal y como hemos indicado en el punto anterior. Pero lo que quizás no sabías, ¡es que también existe la posibilidad de ahorrar incluso mientras los grifos están abiertos!
Para lograrlo, es necesario instalar grifos que dispongan de sistemas de reducción del caudal. Esto significa que cuando se acciona la maneta, la cantidad de agua que sale por defecto es menor que la que se obtiene en la grifería tradicional. 
De nuevo, puede parecer una cantidad insignificante, pero algunos modelos pueden llegar a lograr una reducción del caudal del 50%. ¿Te imaginas seguir disfrutando del mismo confort al ducharte, pero que al mismo tiempo estés ahorrando litros y litros de agua? ¡Pues es posible conseguirlo con sistemas como el EcoNature de Grifería Clever!

Apuesta por grifería termostática

Además de los sistemas que reducen el caudal de agua o los reductores que se pueden instalar en el caño, existe también la posibilidad de apostar por grifos termostáticos. Con ellos, tanto la cantidad de agua que sale por el caño como la temperatura se regulan a conveniencia o a gusto de la persona usuaria.
Es decir, que antes de comenzar con tu ducha, eliges la cantidad de agua que deseas obtener y la temperatura específica. De este modo, incluso cuando se abren grifos en cualquier otra parte de la vivienda, ni se reduce el agua ni se producen variaciones repentinas que puedan provocar accidentes como las quemaduras.
Gracias a ellos, no solo se produce una reducción en el importe de las facturas relativas al consumo de agua, sino también al gasto en energía. Las oscilaciones en la temperatura y el tiempo que se tarda en obtener el agua a la deseada implican un derroche, tanto desde el punto de vista de los litros como del calentamiento de aquella.
En Grifería Clever disponemos de multitud de modelos de grifos termostáticos para incorporar a tu vivienda. Y si deseas obtener más información al respecto, aquí puedes leer cuáles son todas las ventajas que te ofrecen.

Recoge el agua que no usas

Si por el momento no tienes grifos como los que hemos mencionado en tu vivienda y no tienes la seguridad de que vayas a instalarlos, también disponemos de la opción de recoger el agua que se pierde por el desagüe. 
Así, cuando estés esperando que el agua salga caliente o a la temperatura que deseas para ducharte, coloca un cubo y recógela. Tras un par de duchas, te darás cuenta de la enorme cantidad de litros que desperdiciamos en cada una de ellas. Con la que has recogido, podrás fregar, regar las plantas o utilizarla como alternativa a la cisterna.

Evita que la suciedad se incruste

Otra manera eficaz de ahorrar agua es impidiendo que la suciedad se acumule en los platos o en la ropa. Si has cocinado, no dejes que los restos de comida se resequen, ya que luego necesitarás lavar durante más tiempo para poder eliminarlos. Echa un poco de agua tras utilizarlos y espera un rato a que los restos se ablanden. La limpieza será luego mucho más rápida y efectiva.
En el caso de la ropa, puedes tratar las manchas antes de poner la lavadora. De esta manera, no tendrás que optar por programas largos y a temperaturas muy elevadas, ni correrás el riesgo de que las manchas no salgan y tener que volver a lavar.
Como puedes comprobar, ahorrar agua es mucho más sencillo de lo que parece. Solo tienes que incorporar estos sencillos consejos y apostar por grifería que tenga en cuenta al medio ambiente. ¡Descubre todos los modelos que tenemos disponibles en Grifería Clever y síguenos en las redes sociales para más artículos como este!

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