Cinco consejos para hacer el mantenimiento de grifos

Con independencia del tipo de grifería que tengamos en casa, es necesario darles ciertos cuidados periódicos para alargar su vida útil y no tener imprevistos. La dureza del agua de la zona en la que vivamos, la humedad o los sedimentos afectan a su rendimiento y pueden presentar complicaciones. Para que esto no suceda, te dejamos las claves para el mantenimiento de grifos.

Por qué es importante realizar el mantenimiento de grifos

En función del uso que les demos, del tipo de grifería y de otras circunstancias como son el agua o la humedad, las revisiones y los cuidados serán más o menos frecuentes. Lo que sí debemos tener claro es que el mantenimiento de grifos es indispensable si queremos conservarlos en buen estado durante un período largo de tiempo.

Tal y como sucede con el coche o con nuestro propio cuerpo, las viviendas y todos sus componentes necesitan revisiones. Con más frecuencia de la que deberíamos, descuidamos este tipo de piezas y solo nos acordamos cuando empiezan a dar problemas.

Para que esto no suceda, vamos a conocer cómo debemos realizar el mantenimiento de grifos. Siempre es mejor prevenir que curar, así que para mantener la grifería en buen estado, pon en práctica estos consejos.

Controla la dureza del agua

El agua es el principal problema por el que los grifos comienzan a fallar en su funcionamiento. Cuanto más dura sea el agua en nuestra zona de residencia, mayores problemas podremos tener en lo que se refiere a la formación y acumulación de sedimentos.

Cuando estos empiezan a formarse, empezaremos a experimentar obstrucciones en el paso del agua. Si dejamos que estos se sigan acumulando, llegará un momento en el que la cantidad de agua que salga a través del grifo será muy baja o prácticamente nula. Conocer la calidad del agua de nuestra zona nos ayudará a saber la regularidad con la que debemos llevar a cabo el mantenimiento de grifos.

Limpieza sin productos abrasivos

Para la limpieza externa de la grifería, se recomienda siempre utilizar productos que no sean abrasivos. El mantenimiento de grifos cromados debe ser delicado y muy cuidadoso; si utilizamos algún compuesto químico que sea demasiado fuerte, podremos quemarlos.

Por ello, la limpieza de las piezas visibles de los grifos debe realizarse utilizando un trapo húmedo y un jabón que sea suave o blando. Si preferimos algún remedio natural para no poner en juego la estética de la grifería, podemos optar por el vinagre blanco y el limón.

Aunque para nosotros resulten productos con un sabor fuerte, lo cierto es que para la limpieza del hogar, el vinagre y el limón son muy efectivos. Además, no debemos preocuparnos por el olor, porque una vez que se seca, desaparece. Un sencillo truco para el mantenimiento de grifos.

Limpieza del filtro

El filtro es la parte más importante dentro del mantenimiento de grifos. Puesto que es a través de él por donde circula el agua, es ahí donde se van a acumular los sedimentos y donde vamos a observar las consecuencias de la dureza de aquella. Si bien son muchos los factores que pueden afectar a la vida útil de la grifería, no prestar atención al filtro es un camino sin salida que nos conducirá irremediablemente al cambio de la pieza.

Para limpiarla, habrá que retirarla por completo y lavarla con agua. Así podremos eliminar todos los residuos que se hayan acumulado ahí. Además de productos que sean antical, podemos servirnos nuevamente del vinagre para limpiar esta delicada pieza. Con la ayuda de un cepillo de dientes suave que ya no utilicemos podremos eliminar las pequeñas partículas que se encuentren entre las fibras.

Revisa las juntas

El mantenimiento de grifos no pasa solo por la limpieza de la propia pieza únicamente. Debemos revisar todo el sistema para descartar problemas que, en última instancia, afecten al funcionamiento de aquellos.

Algunos tipos de grifos, como los monobloc, pueden sufrir pérdidas en la unión del cuerpo con el caño. Cuando esto sucede, debemos cambiar las juntas tóricas o gomas de estanqueidad. Con la ayuda de un paño, desmontaremos las piezas externas sin dañar el cromado, y cuando coloquemos las gomas nuevas, utilizaremos un poco de vaselina para incrementar la estanqueidad.

Toma medidas si te ausentas

Si vamos a irnos de vacaciones o si se trata de una segunda residencia o una vivienda vacacional, no utilizar la grifería con frecuencia también puede causarnos problemas. Para el mantenimiento de grifos en estos casos se recomienda rociarlos con algún aerosol que lleve silicona y envolverlos con plástico. Para el mantenimiento de grifos en su parte interna, podemos verter un poco de aceite. De esta manera evitaremos que se evaporen los cierres hidráulicos.

Por último, recuerda que el mantenimiento de grifos pasa primero por la correcta elección de los mismos. Los materiales elegidos, así como la adecuación a nuestro sistema de tuberías son factores importantes que no podemos pasar por alto. En Grifería Clever disponemos de una amplia gama de grifos de alta calidad y si lo necesitas, de un equipo de profesionales dispuestos a asesorarte.