La evolución de las bañeras
Quienes nos encontramos ahora en la edad adulta, crecimos con bañeras en nuestras viviendas. Ha sido en la última década cuando se ha incrementado el cambio de estas por los platos de ducha, con el objetivo de aprovechar el espacio disponible. Ahora, porque las tendencias van y vienen o quizás fruto de la nostalgia, aquellas vuelven a estar presentes, pero acompañadas de los avances tecnológicos en grifería. Hoy te contamos la evolución de las bañeras, desde sus inicios hasta los modelos más actuales.
La evolución de las bañeras hasta nuestros días
El cuarto de baño cumple hoy en día una finalidad higiénica y de satisfacción de nuestras necesidades fisiológicas. En los últimos años, por falta de tiempo y de espacio, hemos optado por cambiar las bañeras por cómodos platos de ducha, y hemos olvidado el poder terapéutico y recreativo de aquellas.
En sus orígenes, se creía que el baño tenía un poder medicinal, de ahí que en la antigüedad se apostara por baños comunes a los que la sociedad acudía para beneficiarse de ellos. Pero si centramos la atención en la evolución de las bañeras, parece que las individuales más antiguas datan del 1800 a.C., mientras que las comunes se encontraron en el Gran Baño de la ciudad de Mohenjo Daro, habitada entre el 2600 a. C. y el 1800 a. C.
La diferencia principal entre las individuales y los baños comunitarios es precisamente su uso en un entorno privado. Si bien no hay demasiadas referencias, los restos arqueológicos que se han encontrado sí han servido para demostrar que ya en la Grecia clásica, e incluso en el medio oriente, existían.
En el S. IV a. C., se pasa de la pila circular con un pie elevado al loutron, una sala destinada a baños de agua fría en gimnasios y en termas de la antigua Roma. Pero las grandes precursoras de las bañeras modernas llegarían ya en el siglo XVIII, a las que se sumaban las móviles fabricadas en hierro.
Los avances en fontanería y en medicina le darían un empujón a la evolución de las bañeras, para dejar de ser un objeto con ciertos matices exóticos y convertirse en uno indispensable en la sociedad occidental. Si bien las primeras modernas estarían solo al alcance de las clases sociales más altas.
Materiales utilizados en las bañeras
El mármol fue el material más popular en la antigüedad, trabajado por artesanos que lograron dominar la técnica y crear grandes joyas arquitectónicas. Pero además de este, también la roca, por su abundancia, era otro material frecuente para su construcción. No obstante, la durabilidad de estas era variable según la composición rocosa que tuvieran.
Con el tiempo, surgieron las de hierro fundido que ya mencionamos, muy pesadas, pero también durables, de ahí que algunas se conserven todavía hoy. Su coste era muy elevado, así que para reducirlos comenzó a optarse por el metal y la chapa.
En la actualidad, la evolución de las bañeras ha ido de la mano de la de la industria química, que ha popularizado materiales como la fibra o el plástico, muy económicos y con una alta resistencia. Así, además de estos y de los llamados compuestos, como el corian, también se emplean la madera, la resina y la cerámica.
Bañeras empotradas o exentas
El resurgimiento actual de las bañeras tienen una finalidad principalmente estética, de ahí que las bañeras empotradas que veníamos utilizando sean las que se cambiaron por los prácticos platos de ducha. Mientras que ahora, las exentas, que resultan mucho más elegantes, son las que se están convirtiendo en toda una tendencia.
Nacidas en el siglo 200 a.C., tuvieron que pasar muchos siglos para que se acercaran a la estética de las actuales. En la era victoriana, casi a finales del siglo XIX, es cuando llegaron las bañeras con patas, pertenecientes a familias con un alto poder adquisitivo.
Estas aún usaban el pesado hierro fundido, pero con la llegada de otros materiales más ligeros y menos costosos, fueron derivando en las empotradas de las últimas décadas. Así pasaron a ubicarse únicamente en el cuarto de baño y se centraron en su función higiénica.
La evolución de la grifería
En la actualidad, además de la estética de las bañeras para adaptarse a los distintos estilos decorativos de cada vivienda, también la grifería para bañeras ha sufrido modificaciones, que amplían las posibilidades de las anteriores en lo que respecta a su ubicación.
Los avances en fontanería y en medicina le darían un empujón a la evolución de las bañeras, para dejar de ser un objeto con ciertos matices exóticos y convertirse en uno indispensable en la sociedad occidental. Si bien las primeras modernas estarían solo al alcance de las clases sociales más altas.
Materiales utilizados en las bañeras
El mármol fue el material más popular en la antigüedad, trabajado por artesanos que lograron dominar la técnica y crear grandes joyas arquitectónicas. Pero además de este, también la roca, por su abundancia, era otro material frecuente para su construcción. No obstante, la durabilidad de estas era variable según la composición rocosa que tuvieran.
Con el tiempo, surgieron las de hierro fundido que ya mencionamos, muy pesadas, pero también durables, de ahí que algunas se conserven todavía hoy. Su coste era muy elevado, así que para reducirlos comenzó a optarse por el metal y la chapa.
En la actualidad, la evolución de las bañeras ha ido de la mano de la de la industria química, que ha popularizado materiales como la fibra o el plástico, muy económicos y con una alta resistencia. Así, además de estos y de los llamados compuestos, como el corian, también se emplean la madera, la resina y la cerámica.
Bañeras empotradas o exentas
El resurgimiento actual de las bañeras tienen una finalidad principalmente estética, de ahí que las bañeras empotradas que veníamos utilizando sean las que se cambiaron por los prácticos platos de ducha. Mientras que ahora, las exentas, que resultan mucho más elegantes, son las que se están convirtiendo en toda una tendencia.
Nacidas en el siglo 200 a.C., tuvieron que pasar muchos siglos para que se acercaran a la estética de las actuales. En la era victoriana, casi a finales del siglo XIX, es cuando llegaron las bañeras con patas, pertenecientes a familias con un alto poder adquisitivo.
Estas aún usaban el pesado hierro fundido, pero con la llegada de otros materiales más ligeros y menos costosos, fueron derivando en las empotradas de las últimas décadas. Así pasaron a ubicarse únicamente en el cuarto de baño y se centraron en su función higiénica.
La evolución de la grifería
En la actualidad, además de la estética de las bañeras para adaptarse a los distintos estilos decorativos de cada vivienda, también la grifería para bañeras ha sufrido modificaciones, que amplían las posibilidades de las anteriores en lo que respecta a su ubicación.
Grifería empotrada
La grifería empotrada es la que ya conocemos, que va anclada en la pared, y puede combinarse tanto con las bañeras empotradas como con las exentas. Si bien son grifos clásicos, en Grifería Clever hemos logrado modernizar sus prestaciones, con
tecnología patentada que reduce el caudal y la activación por defecto del agua caliente, como los sistemas EcoNature y ColdTouch, o el anillo Termolimit que controla también el agua caliente.
Además de estas opciones, también trabajamos la grifería termostática, que regulan el caudal y la temperatura al inicio del baño y se mantiene estable a lo largo de este, con independencia de que se abran otros grifos en la vivienda.
Grifería de pie
Una opción más moderna es la grifería de pie para bañeras, que va anclada en el suelo y que permite ubicarla en cualquier lugar de la estancia, de manera que cobra un mayor protagonismo y se evitan las obras en la pared. A su vez, también ofrece la posibilidad de aprovechar todo el ancho de la bañera, ya que el caño y la maneta quedan muy por encima del borde de esta.
Grifería baño-ducha
Una tercera opción disponible en la grifería para bañeras es la llamada de baño-ducha, que cuenta con una salida de agua para llenarla, pero también con un teléfono por si lo que se desea es una ducha. Así se aprovecha todo su potencial y se puede maximizar el ahorro de agua sin renunciar a la belleza y el confort que ofrece una bañera, y a la posibilidad de disfrutar ocasionalmente de un baño relajante en ella. Si quieres conocer todos los modelos de grifos para bañeras que tenemos actualmente, descarga nuestros catálogos y déjate sorprender por la combinación de belleza y de avances tecnológicos.